El Síndrome de Tourette (ST) es una enfermedad neurológica que provoca la aparición de "tics". Los tics son movimientos o sonidos repentinos incontrolables que la persona realiza de forma repetida. Esta enfermedad recibe este nombre por George Gilles de la Tourette, que fue la primera persona en describir el trastorno. Suelen iniciarse durante la infancia y afecta en mayor medida a hombres que a mujeres.
¿Cuáles son los síntomas?
Por norma general, los primeros síntomas son movimientos involuntarios (tics) de la cara, de los brazos, de los miembros o del tronco. Además, se pueden diferenciar dos tipos de tics: motores y vocales. Los tics motores que más se repiten son los pestañear, los gestos faciales, encogerse de hombros, movimientos bruscos de cabeza, sacudir los brazos, estirar el cuello, saltar, hacer gestos obscenos, etc. Los tics vocales más frecuentes son los gruñidos, los gritos y los ladridos, que generalmente se acompañan de movimientos. Antes de que los tics aparezcan, la persona experimenta una sensación corporal incómoda (cosquilleo, tensión, picazón) que se alivia cuando aparece el tic.
¿Quién puede padecerlo?
No se sabe en profundidad el origen de esta enfermedad. De forma general, se asocia a problemas en determinadas zonas del cerebro y a ciertas sustancias químicas (neurotrasmisores) que facilitan la comunicación entre neuronas. Presentan mayor probabilidad de padecerlo, personas con antecedentes familiares de esta enfermedad y los hombres. Además, se sabe que la mayoría de individuos con ST tienen ya otras afecciones como el TDHA, TOC, ansiedad o la depresión.
¿Qué tratamiento sigue una persona con ST?
El Síndrome de Tourette no tiene cura. El tratamiento de esa afección consiste en controlar los tics de forma que no interfiera potencialmente en la vida del enfermo. Se suele optar por combinar la administración de fármacos (antidepresivos, bloqueantes de la dopamina, inhibidores adrenérgicos centrales...) con la psicoterapia. Todos estos remedios estarán también enfocados a solucionar o sanar los problemas que vienen asociados al Síndrome de Tourette. .
¿Cómo es vivir con ST?
Al contrario de lo que se cree, las personas con esta afección pueden llevar a cabo vidas totalmente productivas. Generalmente, las personas van ganando la capacidad de controlar los tics y se produce una mejoría con los años. Aquí te dejamos el testimonio de una de tantas personas con ST.
Fuentes:
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