Hoy nos dedicaremos a hablar sobre las enfermedades eruptivas febriles (EFE), un grupo de patologías infecciosas caracterizadas por la aparición de erupciones en la piel, junto con la elevación anormal de la temperatura. Dentro de estas se incluyen la varicela, el sarampión, la rubéola o la escarlatina, patologías infecciosas con una mayor prevalencia en la sociedad.
La varicela es una enfermedad infecciosa causada por el virus de la varicela zóster. Se caracteriza por la aparición de pequeñas lesiones (denominadas pápulas) por todo el cuerpo que producen un intenso picor. Suele parecer en niños y no reviste gravedad ninguna. Sin embargo, la infección en adolescentes o adultos puede traer consigo complicaciones. Afortunadamente, hace ya varios años que la vacuna se administra en España a los niños y adultos, previniendo millones de casos.
¿Cómo se contagia?
La varicela es una enfermedad altamente contagiosa para todo aquel que no haya estado en contacto antes con el virus o no haya sido vacunada. Las personas que han sufrido varicela sin embargo, quedan inmunizados contra ella salvo raras excepciones. Los mecanismos de trasmisión posibles son:
- Contacto directo con las pápulas del enfermo
- A través e secreciones respiratorias. Cuando un sujeto sano inhala las microgotas que desprende el sujeto enfermo al hablar, existe una probabilidad muy alta de que se infecte
- Trasmisión materno filiar (varicela congénita): Este tipo de trasmisión es considerada mucho más peligrosa. Puede dar lugar a malformaciones en el feto, ceguera y alteraciones en el sistema nervioso y debe ser supervisado.
¿Cuáles son sus síntomas?
El signo típico de alarma de la varicela es el sarpullido, que suele aparecer inicialmente en cara, pecho y espalda. También puede extenderse al resto del cuerpo, incluso el interior de la boca, los párpados y el área genital. Posteriormente, estas pequeñas pápulas suelen convertirse en ampollas llenas de líquido que provocan un intenso picazón. Generalmente, al pasar un día estas ampollas se rompen y forman costras.
Complementariamente, puede aparecer:
- Fiebre
- Cansancio
- Falta de apetito
- Dolor de cabeza
La mejor forma de prevenir la varicela, además de llevar una serie de precauciones, es la vacunación. Hace varios años que la vacuna se contempla en el calendario de vacunación infantil de SERGAS. Si perteneces aún grupo de riesgo o crees no haber pasado la infección, consulta a tu médico de atención primaria para estudiar la posibilidad de vacunarte ahora.
Fuentes:
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